Un arma llamada Internet
Acabamos de escuchar en la radio una noticia que aunque ya hemos hablado de ello en varias ocasiones, queremos dedicarle un pequeño espacio. Una investigación realizada afirma que más del 55% de los niños tienen acceso libre a internet, es decir, sin tener ningún filtro en los contenidos que pueden ver.
Es curioso como no somos capaces, de dejarles solos en mitad de la calle valorando los riesgos como el que le pueda atropellar un coche, que se pierda en el centro comercial, que alguien le pueda hacer daño, etc. y en cambio les dejamos solos frente a esa “selva” que es internet. En esta frondosa “selva” podemos encontrar grandes mundos positivos a explorar, motivaciones, innovaciones, acceso a la cultura, etc. pero también hay trampas.
Poco a poco se han ido modificando el uso de las pantallas, si hace unos años el niño se tenía que sentar frente a un ordenador para tener acceso a internet, ahora tenemos las tablets o los móviles, lo que permite poder entrar desde cualquier lugar. Esto ha tenido entre otros efectos el que pasen más horas conectados, no es tan raro el encontrarnos a niños de 3º o 4º de primaria con un uso a internet sin ningún control. También tenemos que observar cómo han cambiado las costumbres en el hogar, si antes era típico el ver a una persona meterse con una revista al baño, ahora vemos como es con el móvil o la Tablet, incluso se la llevan a la cama antes de dormir o no desconectan el móvil en toda la noche (en unos años tendremos una pandemia de hemorroides y todos los hombres mearán sentados). Entre estos hábitos que han cambiado podríamos incluir el cómo antes llevábamos unos papeles y pinturas o algún juguete para que se entretuviera el niño, y ahora lo que llevamos es solo el móvil o la Tablet que con un simple dedo y sin ningún esfuerzo se entretiene.
Desde nuestra Clínica os recomendamos encarecidamente que pongáis un control parental en cualquier dispositivo de internet que tengan vuestros hijos. A parte por favor vigilar qué hacen, dónde se meten, qué intereses tienen ya que por ejemplo tenemos muchas aplicaciones gratuitas, que son un verdadero riesgo que nuestros hijos se las bajen. Estas aplicaciones están diseñadas para enganchar, como los juegos online, son gratuitos donde van superando fases y así hacen que el niño tenga que pasar más tiempo jugando, creándoles y aumentándoles la ansiedad.
Sabéis que nuestra visión es siempre intentar sacar algo bueno de cada cosa, podemos aprovechar el estar con nuestros hijos compartiendo la curiosidad frente a ese mundo que nos brinda internet. Actualmente la edad se ha adelantado, los niños empiezan antes a navegar, pero ojo, no son adolescentes, en esta etapa nos siguen demandando atención, son mucho más abiertos que en la adolescencia. En estas dos épocas del desarrollo nos necesitan, pero es más fácil en un niño de 7 u 8 años que verbaliza el que estés con él, que juegues con él, etc.
No lo prohibamos sino que vamos a acompañarlos a que entiendan nuestra visión, vamos a interesarnos por las fotos que ponen en Hinstagram, observa cómo es su comportamiento cuando le dices “deja el móvil o el ordenador que vamos a cenar”, vamos a ver qué amigos tiene en Twiter, qué cambios de humor tiene, si va dejando de lado otras formas de ocio, estudios, amigos, vamos a contarles los peligros a los que se exponen, vamos a entrar en su mundo para asegurarnos que él sabe poner freno a tanta información y seleccionarla adecuadamente. Tener cuidado con el cyberbulling, que hoy por hoy es el arma más dañina que podemos encontrarnos en colegios e institutos de la que no somos conscientes los adultos, ya que conlleva un sufrimiento y una angustia vital para el que lo padece, y le puede traer graves consecuencias. Fijémonos en qué tipo de conversaciones tiene y en los cambios en su estado de ánimo. Estemos con ellos cuando haga un trabajo en el ordenador. No es que vayamos a ser unos controladores excesivos, sino que vamos a protegerles. Digamos NO ante las cosas que no son apropiadas para su edad aunque suponga un conflicto, es decir, vamos a cuidarles porque si los riesgos que conlleva este uso indiscriminado no sabemos trasmitírselos para que tengan cuidado, seguramente les podrá atropellar un camión llamado internet.
Share post